La gente inacabada, el libro de cuentos
LA GENTE INACABADA,
EL LIBRO DE CUENTOS DE HÉCTOR LIZANA
La Gente Inacabada, el libro de cuentos de Héctor Lizana Durán está en su segunda edición en Español a lo que se suma una edición en Portugués
. La primera edición nació como consecuencia de un premio en un Concurso de Literatura realizado en la Facultad de Letras de la Universidad Federal de Río de Janeiro, una de las mejores de Latinoamérica, donde el autor estudiaba.. Se llamó Universitarios Verso&Prosa, una selección editada por la Editora carioca José Olympio con cuentistas y poetas seleccionados en ese concurso.
A continuación, también en el período universitario gracias a una beca llamada beca trabajo-arte, (bolsa-trabalho.arte) escribió y publicó el siguiente libro de cuentos: La gente inacabada.
Esa beca la ganó durante tres años seguidos. Cada año dio nacimiento a un libro: Después vino El mago y por último La tierra está germinando
La gente inacabada el nombre del primer cuento y libro es utilizado para esta selección de cuentos de esos tres libros publicados en los comienzos de los 70, hablamos del siglo pasado.
Es interesante comentar que la primera edición del libro la gente inacabada fue caligrafiada y diseñada.
Primera opinión sobre el libro por el periodista brasileño Arlón José de Oliveira
Héctor Lizana, estrena con un libro cuyo título es "La Gente Inacabada" y lo hace dentro de los moldes de una originalidad capaz de hacer escuela. Su obra es caligrafiada*, o sea, manuscrita, mas lo que impresiona soberbiamente es el tratamiento del paisaje humano, en su universalidad.
Quien piensa que los eternos conflictos del corazón del ser humano están trillados, se engaña. La forma con que son tratadas esas fricciones, acaba por adentrarlas en novedades que el escritor va a explorar dentro de su visión óptica del mundo.
En "La Gente Inacabada", un grupo de personas se autocritica. Yo diría que el autor hizo uso de una idea sartreana, configurada en "El Espejo", de Paul Sartre. Pero no es eso lo que sucede. La visión, aquí, de nuestro Héctor, se transforma en contemplación del universo moderno, inquietante e incomprendido, donde todas las limitaciones son combatidas y todas las luchas acaban siendo copiadas de la propia vida.
Otro cuento que mucho me impresionó, tanto en la forma como en el contenido es "Amor", tema milenariamente usado. Aquí yo renuevo mi punto de vista: nada hay de ultrapasado para el artista que sabe decir. Porque tal vez en ese trabajo exista toda la profundidad del joven cuentista porque en rápidas pinceladas, reconstruye la historia que es mía, suya, de toda la Humanidad: la conquista de corazón a corazón, el tedio consecuente, los rechazos naturales. Pero en el final del cuento, el reencuentro, marcado por la tolerancia y el amor, solamente conquistable después de la subida de un calvario de conquistas y derrotas íntimas, de derrotas y conquistas del hombre, frente a su inmadurez en el amar y en el querer. El libro, pues, merece ser leído: original y sabio.
Arlon José de Oliveira
Abogado y Periodista
Vitória - E.S, Brasil
DIEZ CUENTOS PARA SALVAR LA INOCENCIA EN EXTINCIÓN
ALBERTO CARRIZO
Poeta, Escritor y ensayista
Candidato al Premio Nacional de Literatura en 2.005
Miembro correspondiente de la Academia Chilena de la Lengua
Vivir en un país con otra lengua y otras 150 menores habladas por los que se quedaron en los bosques y se internan cada día sin calendarios, en el gigantesco río que asoma hacia el atlántico, vivir décadas y décadas entre la fiebre del canto y la danza lúdicay el tamtam del tiempo como en fiesta; vivir entre cuarenta grados de temperatura y un metro de lluvias tímidas que amamantan el aire tropical, vivir en Brasil, en los años de plenitud vital para recoger ese misterioso eco de secretos que acompañarán la madurez y regresar, imperceptiblemente, a la patria de angosta geografía para respirar este aire salino imaginando como verdear estos cerros, es una tentativa de vida que no todo artista asume, porque cambiar universo lúdico por la prisa de lo pragmático, es difícil. Sin embargo, por secretas razones de ansíos, Héctor Lizana Durán lo hizo, entre medallas por sus pinturas y galas por su literatura. Y nos está acostumbrando, con su presencia, a comprobar el como sobrevivir en dignidad de esforzado desafío con sus propias fuerzas, para convertirse en mentor cultural que abre calles nuevas para otros artistas. Ha logrado fundir el hedonismo que vivenció con la porfiada disciplina del compromiso interior de repoblar su arte, con otras tintas y nuevos pinceles: poeta, cuentista, pintor, animista, curador, tutor, fablador, todo ello en un solo cuerpo herido que nos enseña el vencimiento del dolor y la persistencia espiritual. Es la madera de su árbol, que lo explica.
Y trae, un mensaje con transparencia de nueva lenguaje híbrida que a ratos quiebra o triza el relato español formal, o difiere formas ortológicas que no importan mucho, si en el contexto queda claro el gran leit motiv existencial. Artista que en diez cuentos escritos, decenas de años atrás no recela de críticas de los partidarios del nuevo relato descansado en la farándula. Sus cuasicuentos titulados GENTE INACABADA, constituyen intención de advertir al lector que no debe importarle el ritmo, ni el contruxto palabrero, ni los desenlaces en tránsito o las tramas que no ascienden al clímax, pero se entienden en latencias pendientes.
Leer LA GENTE INACABADA, es leer un itinerario, que a ratos equilibra candidez con transparencia, o en otros instantes acoge el hiperrealismo, para consumar el gran propósito.
Fue así, como logré descubrir ese camino existencial aprendido en tierras vírgenes del celo criticón. Primero EL INDIO que atreve danzar en el asfalto; después EL MAGO capaz de sembrar flores, pronto ACTOR aplaudido por no actuar; enseguida EL VIAJE, para entender que la llegada del solitario es una excusa; como accidente asoma AMOR con el descubrimiento del contrario y asumir que LA MARIPOSA, es, porque aprende como oruga a caminar en el cemento. Surge LA GENTE INACABADA, aunque no le falte el corazón, pero son gigantes maltrechos sin reconocerse imperfectos.
Y finalmente el inconsolable HOMBRE CASADO CON SU TELEVISOR y prisionero de su soledad. En suma, un mundo de gente incompleta en el ser.
Por eso, cuando leamos a Héctor Lizana . no seamos pretenciosos en falenciar la forma de sus cuentos, sino tentar aceptar la sencillez del rescate de una inocencia que día a día, perdemos, como seres prisioneros de la inmediatez, ya amenazante de este siglo.
Leído en lanzamiento segunda edición del libro de Héctor Lizana- Sala de Arte Collahuasi.
Viernes 8 de Septiembre del año 2.006 en Iquiqu